miércoles, 9 de diciembre de 2015

Ellos también cometen errores (II)

Siguiendo con la entrada de ayer, hoy traemos una posición relativamene sencilla que tiene como protagonista al vigente campeón del mundo y uno de los mejores jugadores de la historia: Magnus Carlsen. Carlsen es conocido por no ser excesivamente brillante en las aperturas (aunque existen algunas partidas que desmienten este sentir general), pero suele ir apretando a su rival como una anaconda, sacando agua de las piedras, para terminar imponiéndose en posiciones donde el resto de los mortales firmaríamos tablas sin pensar mucho. La posicón que presentamos hoy corresponde al Campeonato Europeo de Selecciones celebrado hace apenas un mes. Carlsen, primer tablero de Noruega, se enfrenta, con blancas, a Yannick Pelletier, defendiendo los colores de Suiza. Entre ambos, casi 300 puntos Elo de diferencia. Vaya, lo que en lenguaje coloquial significaría un pichón (relativamente hablando, claro: Pelletier nos sacaría del tablero a guantazos a casi todos nosotros). Así que Carlsen aprieta y aprieta, pero no con demasiada fortuna hasta que se llega a la siguiente posición. Supongo que Carlsen siente la presión de "tener que ganar":
Pues eso, que ni el mejor jugador del mundo se libra de esos gazapos en los que todos caemos.

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