viernes, 30 de agosto de 2019

Sinquefield Cup: ellos también cometen errores

Ayer finalizó la Sinquefield Cup, que ha reunido a un súper-elenco, algo que antes era muy complejo y que sucedía muy de vez en cuando y que ahora ocurre con cierta frecuencia. No sé si, por este motivo, el número de tablas en estos grandes "Supertorneos" es muy elevado. Es normal que en partidas de jugadores de muy alto nivel, la frecuencia de tablas sea muy elevada, pero tengo la sensación de que, si hay que afrontar estos Torneos con asiduidad, la preparación específica es menor. O, tal vez, el estímulo de emplear novedades, disminuya.

En cualquier caso en este Torneo, en las tres primeras rondas, todas las partidas terminaron en tablas, salvo la muy grosera equivocación de Nepomniachtchi, que ya ha dado la vuelta al mundo:

La posición está bastante igualada, pero el blanco consigue meterse en un lío, ¿cómo?

Y, en la Rd4, Aronian quiso imitar a Nepo:
¿Qué jugada del negro pierde casi instantáneamente?

Un tanto sorprendente, también, aunque en posición algo ya comprometida de Nakamura, en esta situación:
¿Se avergüenza Naka de su alfil?

Bueno, otras partidas también han tenido su aquel, pero, en su mayoría, como ya os comentaba, superabundancia de tablas.

A destacar, al menos desde mi punto de vista, el excelente nivel mostrado por Anand...aunque tal vez no se ha mostrado todo lo contundente que solía en la resolución de las ventajas y eso le alejó del triunfo final. Y, por supuesto, la "resurrección" de Carlsen: el noruego entabló las nueve primeras partidas y aceleró en las dos últimas para obtener los puntos enteros y consiguió empatar con Ling.

El caso es que un Torneo tan serio como la Sinquefield, evita espectáculos como aplicar un sistema de desempate que, en función del elegido, determina el ganador (los torneos de Ansoain y el Iberoamericano, por ejemplo, hubieran cambiado de manos si, en cada uno de ellos, se hubiera aplicado el desempate del otro). Y llevó a Diren Ling y Magnus Carlsen a jugar, primero, dos semirrápidas, que finalizaron con empate. Y, posteriormente, rápidas, donde el noruego, no estuvo precisamente acertado (no estuvo muy fino en el Grand Chess Tour de Saint Louis, que precedió a la Sinquefield, precisamente)...o el chino, muy preciso.

Las partidas (incluidas las del desempate) están en este enlace.

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