Alta concentración de partidas este sábado en la Sección: ni más ni menos que 26 tableros entre División de Honor, Primera y Segunda. Al final un equipo de Segunda jugó en la Sala Nueva. Menos mal que hemos ampliado nuestros recursos.
En División de Honor nos tocaba en suerte, es un decir, Ansoain. Ya advertíamos hace 8 días, que lejos de pasar las estrecheces típicas de equipos recién ascendidos, el equipo apuntaba maneras. Para rematar la faena, el lunes la FNA anuncia nuevos refuerzos de nuestros adversarios. Y nosotros, con un par de bajas en nuestros primeros tableros.
No todo son malas noticias. El primer tablero de Ansoain, Mikel Huerga, no estará, porque está jugando, y ya de paso gana, el II Open Internacional S'Arenal. Por cierto, a algunos les da para todo: según parece Huerga también era el árbitro de guardia de la Rd2 del Navarro por Equipos, mientras jugaba en Mallorca, pero eso pertenece a otra historia.
Como en el Navarro por Equipos no hay que anticipar las alineaciones, como ocurre en el CECLUB, por ejemplo, resulta muy revelador eso de ir viendo aparecer determinadas caras de tu equipo adversario, porque te va dando una pista de cual será la alineación final...bueno, no tanto, porque resulta que el B de Ansoain de Segunda, juega con nuestro D, así que no queda muy claro si algunos de los que están entrando juegan en DH o en Segunda. Bueno, se van rellenando las Actas y nos vamos sentando (una operación complicada con tanto equipo en juego, no os creais).
La ausencia de Huerga queda cubierta por la presencia de Maxim Ventura. No está David Arjol, así que todo el equipo sube una plaza con respecto a la Rd1 y entra Zaratiegui en el 8º tablero. Con las bajas de Dani y Aurelio, con respecto a la Rd1, también nuestro equipo baja un poco. Pero un cálculo por encima, nos pone en un 5-3 teórico, pero, claro, hay que jugar las partidas.
No sé si comentarlas por su orden de resolución o por el orden de tableros...la cosa tiene su importancia. Bueno, vamos por la primera opción.
Debíamos de llevar apenas veinte minutos de partida. Intento fijar un poco la atención, porque algunos hecho desarrollados en las horas inmediatamente anteriores a la partida me tienen un poco distraido y tras algunas dudas de cómo plantear mi defensa, dirijo mi vista a la derecha. Un alfil de Axel Roviralta, tras haber salido por b7, está en g2. Lo malo no es que la torre de Mikel siga en h1, sino que el caballo también está en g1. Por un momento, pienso que están jugando una Owen, que Axel ha jugado alguna vez, y Mikel ha ejecutado el sacrificio ritual...pero Mikel no suele jugar e4. Estiro el cuello y...no. El caballo parece haber vuelto a g1 tras salir y no parece que se pierda la calidad, sino la torre entera. ¡Caramba! todo esto en apenas veinte minutos. Para hacer corta una historia larga, defensa hipernumantina (y no, no es el nombre de una apertura) de Mikel, en la que se emplea a fondo, durante varias horas. Me recordó a la heroica, aunque desesperada, defensa de Ganguly en el CECLUB de hace un par de años, cuando Solvay obtuvo el título, con el mismo resultado (el de la partida, digo; no el del equipo).
Empezar un encuentro así no contribuye a la estabilidad, desde luego.
En el resto de las partidas, un poco de todo, pero la de Pedro Viñal ante Aitor Huarte no pinta bien y Cesar parece atravesar algunas dificultades ante Zaratiegui.
La partida que se adelanta al resto, es la del segundo tablero. El joven Estéfano se revela como un rápido pistolero: pieza que se mueve en el tablero, pieza que se cambia. Txemi anda con cara de preocupacion porque está dando la pinta de que no va a poder demostrar mucho sobre el tablero. Y así es, las tablas se firman antes que más tarde, con cierta frustración por parte del nuestro. Hubo un tiempo en que con blancas se jugaba para ganar. Los tableros uno (Jesús) y tres (Miguel) tienen ciertas similitudes y ambos parecen ofrecer alguna ventaja para los nuestros. Mientras que en el cuatro (Pedro Unanua) y en el seis (Mariano) la cosa parece igualada. Poco a poco, en el 8º, Cesar va consiguiendo igualar la posición aunque a costa de cierto consumo de tiempo. Con el transcurso de la tarde, las partidas aumentan en dramatismo.
Pero solo la de Viñal parece decantarse claramente y no es a favor. Así que la tarde comienza a no pintar demasiado bien. Es verdad que el otro Pedro, Unanua, parece que va madurando su posición con mucha paciencia y mucha técnica, y asumiendo ciertos riesgos. La posición de Miguel parece algo superior, pero empieza a estar fatal en el reloj. La posición de la primera mesa parece muy interesante: Jesús ha permitido que un alfil negro entre hasta h2 tomando el peon, pero el alfil parece estar entre medio cazado o, si se retira, abrir la columna h para la intrusión sobre el enroque del rival, lo que obliga al negro a consumir una gran cantidad de tiempo. Las partidas se aproximan a las cuatro horas y Viñal termina cediendo. Diría que soprendentemente, pero más por mi ausencia temporal, la primera y la tercera mesa se nos vuelven del revés y perdemos ambas. La octava mesa sigue el camino opuesto, pero en los apuros de tiempo, Cesar no puede acertar con la continuacion más aguda, tras haber madurado la posición correctamente, y se terminan firmando las tablas. Afortunadamente, las dos últimas partidas caen de nuestro lado tras imponer Mariano (con Malón demuestrando un exquisito gusto masoquista, prolongando un final sin esperanza hasta lo infinito) y Pedro Unanua su calidad en los finales. Un 3-5 que sabe a poco, pero que pudo ser cualquier otra cosa durante la tarde.
En el resto de la ronda, tras su victoria de San Juan en la Rd1 ante los vigentes campeones y nuestra amplia victoria ante Paz de Ziganda, soprende la corta victoria de los piscineros. Meritorias las victorias de Gorka y Adrián en los primeros tableros ante rivales superiores.
Los vigentes campeones (Orvina) retomaron la senda de la victoria ante la juventud de Santa Ana, con un margen mayor que el año pasado, lo que es una excelente noticia para ellos, dada la pujanza de la juventud ribera. Especial mención a la victoria de los orvinos en los tres primeros tableros.
Intenso dramatismo en el cuarto encuentro de la jornada. Los runeros se impusieron por la mínima en el feudo de Mikel Gurea, también con valiosas victorias, en este caso de Lisarri y Barri, ante rivales teóricamente superiores, en los primeros tableros.
Tras estas dos primeras rondas, el líder es Ansoain, con 11 puntos, a los que siguen un cuarteto de equipos: San Juan, Orvina y Santa Ana, con 9, y nosotros con 8,5. Algo rezagados, Runa (6,5), Paz de Ziganda (6) y Mikel Gurea (5). Pero esto es muy largo y se adivina una mayor equilibrio que el vivido en los últimos años.
Los resultados de la Rd2, por mesas, está en el siguiente enlace.
La semana que viene otro encuentro duro, San Juan, que cuenta sus encuentros por victorias.
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