Tormenta perfecta en la Rd4 del Torneo de Invierno

Las primeras mesas

En un día en el que la metereología no era precisamente favorable y llegar hasta Echavacoiz se antojaba como un viaje de placer a Mordor, los resultados deportivos, al menos en las primeras mesas, han sido espectaculares para los nuestros.

En la primera mesa, Cesar tenía un difícil contrincante ante Joseba Otano, quien se suele crecer en este tipo de torneos. El de Arrano sorprendió con una Escandinava, que no es el repertorio habitual y el nuestro decició salirse rápido de lo evidente. Cesar consiguió ventaja de desarrollo y el rey negro nunca encontró el descanso del enroque.

En la segunda mesa, Mikel Ochoa, jugando con negras, contra José Zaratiegui, jugó sólido y no creo que pasara grandes apuros para conseguir unas tablas, que parecieron contentar a ambos contendientes. En la tercera mesa, uno de los duelos más interesantes. Alejandro se enfrentaba con blancas a Asier Alfaro: una Francesa del Avance, de esas que dice Sveshnikov que dan ventaja al blanco. Alejandro quedó con el peón de e5 algo tocado, pero lanzó un fuerte ataque contra el enroque de su rival. La refriega se saldó con una pieza de más para Alejandro (pareció que podía haber sido más), pero, para darle emoción, puso todos los peones  en el mismo color de su alfil (de más). Por un momento, pareció que la cosa se había complicado en exceso, pero, a pesar de la presión del reloj, remató con precisión.

Un aspecto de la sala

En el cuarto, Alex, con negras,  jugaba con Diego Blanco. Cuando todo apuntaba a una posición más o menos igualada, al nuestro le dió por mostrarse novedoso. El de San Juan pudo forzar triple repetición, pero sólo llegaron a 2,5 y, al no atinar con la más precisa, Alex condujo el resto de la partida con firmeza, a pesar de los evidentes signos de no encontrarse físicamente bien. Pelear en esas condiciones es un buen signo de no conformarse con lo trivial. Para finalizar los resultados de las mesas altas, Mindeguía venció a Sanchiz, aunque el de Orvina no lo pasó demasiado bien en varias fases de la partida, mientras que Abaurrea vención con cierta suficiencia a Lacruz.

En el resto de las mesas los resultados no fueron tan favorecedores para nuestros colores como en las primeras. Isidro cedió ante Nerea Rosa, quien está haciendo un magnífico torneo, Iker ante Apesteguía (lo contrario hubiera resultado una sorpresa de primera magnitud) y Niobe ante Iñigo Elía (idem de lienzo). Menos evidentes resultaron las derrotas de Angel ante Daniel Aguinaga y de Aimer ante Miguel Fernandez. A ambos les queda el consuelo de que, como sus rivales no tienen Elo aún, la derrota es menos dramática. Afortundamente, Leyre e Inés hicieron sus deberes.

Tras la cuarta ronda, la clasificación está encabezada...¡por tres oberenistas!

Aún queda mucho y otros siete jugadores circulan a medio punto, pero, de momento, estamos en el camino.

Los resultados de esta ronda están en este enlace y la clasificación, aquí.