domingo, 25 de noviembre de 2012

Y el campeón es ...¡San Juan!

Primeras mesas, máxima tensión
Llegábamos a la última ronda con una de las más, si no la más, emocionantes situaciones del Campeonato Navarro Absoluto por Equipos de los últimos años. Por arriba, tres equipos en sólo medio punto, con enfrentamiento directo entre dos de ellos. El resto de los 5 contendientes estaba implicado matemáticamente en el posible descenso.
La ronda se jugó en sede única en la Residencia Fuerte del Principe, de manera que uno se podia desplazar de mesa en mesa para ver, con más dramatismo, si cabe, si ese medio punto era suficiente o había que seguir luchando. Creo que tanto la idea de sede única para la última ronda, como el lugar seleccionado son motivo de felicitación para la Federación Navarra (si hay que quejarse de algo se hace, pero también hay que saber reconocer los aciertos de nuestros sufridos regidores).

El campeonato
Mientras intentábamos desentumecernos del aire de siesta y observábamos nuestra situación en la sala, dos de los grandes interrogantes de la semana se iban resolviendo. No, los cubanos de Mikel Gurea no estaban por la sala y, sí, San Juan no sólo había convocado a sus refuerzos maños, sino que, jovial como siempre, Nikolai Ninov se movía entre los tableros: habían venido con todo.
A pesar de no poder disponer de sus refuerzos caribeños, Mikel Gurea dependía de sí mismo para ser campeones, con sólo igualar el resultado de San Juan (Orvina se encontraba, al menos teóricamente, en la misma tesitura, pero resultaba evidente que la lucha con San Juan era desigual). Sin embargo, se enfrentaban con Runa, que tienen mucho peligro en muchos tableros (que nos lo pregunten a nosotros que fuimos, no sé si algo confiados, y nos quedamos en un empate) y, efectivamente, Mikel Gurea consiguió 6 puntos, meritorios, sí, pero insuficientes para enfrentarlos a los 7 que obtuvo San Juan. Y eso que la incertidumbre se mantuvo hasta bien avanzada la tarde porque no fue hasta casi las nueve de la noche cuando los sanjuandarras obtuvieron su séptimo punto, el necesario para conseguir el campeonato. La clasificación completa se puede consultar aquí.

El descenso
Si por arriba, las cosas estuvieron calientes, no lo estuvieron menos por abajo. Como decía, salvo los tres contendientes por el campeonato, todos estábamos, al menos matemáticamente, implicados en el descenso; bien es verdad que, tanto Nuevo Casino, como nosotros, disponíamos de unos puntos de ventaja y nos enfrentábamos con los equipos que lo tenían más complicado, por lo que, en principio, nuestra batalla particular era más por el cuarto puesto. Pero estaba claro que no nos podíamos fiar. En el intenso dramatismo con el que se vivió la jornada, Runa fue el primer equipo en esquivar el estoque, gracias a esos dos puntos de oro conseguidos ante los de Burlada que les privaron a éstos del campeonato. Ni que decir que los runeros lo celebraban como si hubieran conseguido la Champions.
El damnificado de la situación fue Paz de Ziganda que, a pesar de obtener unos meritorios 3,5 puntos ante Nuevo Casino, no pudo alcanzar a Santa Ana. A los de Villava les ha pesado demasiado el pobre arranque que tuvieron ante nosotros y descienden a una Primera categoría, de la que deberían retornar a Preferente con cierta celeridad por la calidad que atesoran sus jugadores.
El puesto de promoción fue para Santa Ana, que no tendrá que jugarla por la clasificación obtenida por su equipo B en Primera Categoría, al perder 5-3 ante nosotros, pero esa es otra historia.

Paz de Ziganda
Oberena
Nos enfrentábmos a Santa Ana, más pensando en conseguir ese cuarto puesto que en complicaciones, pero sin fiarnos demasiado. Jugar contra un equipo que se está jugando la vida no permite ninguna relajación. Además, no podíamos contar con Txemi ni con Miguel, por lo que a pesar de la diferencia en la clasificación, la esperanza matemática para este encuentro era un empate a 4, que se antojaba escaso en función de la exigua distancia que nos separaba de Nuevo Casino, en la lucha por el cuarto puesto.
En el primero, Daniel (con blancas) salió con ligera ventaja de la apertura y pareció que se podía anotar el punto, pero la más que tenaz (¿férrea?) defensa de Patxi Sesma contuvo los envites de Dani. Tablas. En el segundo, Aurelio consigue salir de la apertura ante Luis Fernández Lezana con un esquema tipo Grunfeld, pero con algún tiempo de más ( ;-) ¿cómo se consigue esto?). Ese es el tipo de cosas que no se le puede regalar a alguien como Aurelio. Punto al bote. En el tercero, Javier, nuestro capitán, juega con Diego Ramírez, quien le plantea una Dragón, pero no éste no tenía alas ni fuego, y el contrajuego del negro nunca apareció en el tablero: Javier gana con consistencia. En el cuarto, Cesar se las veía con el riojano Moisés Laguardia; comienzan con una apertura de alta tensión, pero, antes de la 20, masiva liquidación de piezas y cuando todo parecía que se resolvería en unas tablas rápidas, el capi de Santa Ana presiona a su jugador para que intente sacar petróleo de donde no lo hay (servidumbres de la clasificación) y se terminaron firmando las tablas, pero 50 jugadas y varias horas más tarde. En el quinto, Txus juega uno de sus esquemas favoritos ante David Garrido, pero la aparente ventaja se va diluyendo y el negro parece ir consolidándose, hasta que se revierten las tornas y se acuerdan unas tablas cuando parece que si el punto puede caer de algún lado, es para el nuestro. En el sexto, Txema no tuvo fortuna y le tocó en suerte uno de esos jóvenes, en este caso Alejandro Bernal, que juegan mucho más de lo que marca su Elo (y ya han sido varias ocasiones en este torneo). En el séptimo, brillante producción de Ángel, a las que ya nos tiene bastante acostumbrados (aunque los resultados no siempre han acompañado) y victoria ante Jorge Sanjuán. En el octavo, Mikel parece comenzar con decisión su partida ante Saifi Mourad, cuando, de repente, su posición se desmorona; con cualquier otro, es más que probable que el punto hubiera volado hacia La Mejana, pero con Mikel, no, ya se sabe. No es que solamente consiguiera las tablas, sino que, a poco que le hubieran dejado...
En resumen, victoria 5-3, buena despedida del torneo y un cuarto puesto que, aunque se ha resistido, corresponde a lo que hemos hecho a lo largo de estas siete semanas.
En los próximos días, algunos comentarios sobre cómo ha terminado la Primera y un pequeño análisis del campeonato.

El postpartido
Algunos oberenistas nos fuimos a cenar al terminar la jornada, para celebrar el resultado y, sobre todo, para pasar un buen rato; lo que conseguimos sobradamente. La próxima vez, a ver si se anima alguien más

1 comentario:

Anónimo dijo...

Felicidades por el cuarto puesto!